En estas mis últimas líneas para ti ¿qué he de decirte?
Como es natural, pues no te voy a decir a ti como era ni lo
que era ¡no! pues resultarían palabras innecesarias pues esto bien lo sabes tú.
Cuando estas líneas sean en tu poder, ya hará tiempo que yo
dejé de existir, segada mi vida por las balas del fascismo. Y lo mismo que
sabes cómo era y lo que era, pues sabes también por lo que ha muerto el padre
de tus hijos, por la consecución de una vida mejor para nuestra clase, para la
clase obrera.
Y ya te ves responsable de la educación de nuestros hijos,
lo que procurarás realizar siempre acorde con lo que ellos deben ser en la
vida, personas dignas de toda consideración y de respeto de cuantos amen el
bienestar de los humildes.
Una cosa creo tienes como deber al morir yo, como madre de
mis hijos, decirles la verdad, que conozcan esta porque nadie mejor que ellos
tiene derecho a conocerla. Quiere y ama a nuestros hijos como yo los quería y
amaba, como lo más sublime de mi vida. Sé feliz y muy feliz toda tu vida y
recibe este mi último abrazo."
18 de mayo de 1943
Prisión provincial de Madrid (Provisional)
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